¡Felices fiestas!

Hoy día 24 quiero aprovechar e inaugurar este apartado de la página web dando mis felicitaciones por las fiestas. 

Hablamos con mi marido ayer noche, me dijo algo que me hizo pensar mucho…

“Estos dos últimos años han sido una montaña rusa en la vida de todos, pues nos han enseñado y nos sigue enseñando muchísimo todavía, (y verdad no le faltaba al decirlo).

Si entre todos hiciéramos un ejercicio de reflexión, seguramente veríamos que nuestras vidas han cambiado, incluso más de lo que nos imaginábamos cuando empezó a asomarse la pandemia en las pantallas de nuestros móviles”

Ciertamente dentro de la reflexión de mi marido, a pensar de ver cosas malas que nos ha sucedido a todos en el país con esto del COVID, existe un punto positivo. 

Si os fijáis, a pensar de que hemos tenido que aprender a vivir con una continua incertidumbre, hemos conseguido salir adelante, y tras mucho luchar, parece que hemos ganado la batalla, una batalla que nos parecía imposible en un principio, claro que esta batalla nos ha dejado cicatrices, ¡y qué cicatrices!”

Pero como dice él, “esas cicatrices están ahí para recordarnos lo fuerte que podemos llegar a ser”. 

Ahora, lejos de cómo empezó todo, podemos decir que hemos tomado consciencia de dónde estamos, y de con quiénes estamos. Ahora podemos decir que estamos más presentes con los nuestros, y que damos más de lo que dábamos inconscientemente. 

Creo que hablo de parte de todos cuando digo que estos dos años nos han enseñado a que dejar pasar los días, no es vivir, nos han enseñado a que tenemos que quitar el piloto automático de nuestras vidas para empezar a vivirla como nos la merecemos, disfrutando de los momentos, de los nuestro y de los lugares que visitamos. 

Intentando que cada mañana, cuando despertemos, no veamos esa mañana como una más en nuestro calendario, sino que sea “la mañana” aquella mañana en la que… 

Desde aquí os animo a levantad la cabeza y escribid el guión de vuestra propia vida, un guión con el que disfrutéis de verdad. 

Mi marido y yo os queremos desear un año llenito de ganas, ganas de cumplir todo lo que os propongáis, porque podéis hacerlo y lo sabéis. 

Desde lo más profundo de nuestros corazones os deseamos, ¡feliz Navidad y feliz año nuevo!